Mantenimiento de tu piscina o cascada ornamental (II): pH y Cloración

Aunque el buen tiempo parece que se está haciendo de rogar es conveniente ir poniendo el agua de la piscina, cascada o fuente en condiciones de cara al período estival. Pese a que en Canarias tenemos la suerte de no sufrir los duros inviernos que hay en otros lugares de España y podemos disfrutar de baños durante todo el año,  el mantenimiento de las aguas suele descuidarse un poco en esos meses donde el frío aprieta más de lo normal.

En la primera parte de este artículo hablamos de cómo calcular el volumen de agua que tenemos, dependiendo de la forma y la profundidad de nuestro contenedor de agua. En este artículo abordaremos  dos de los tratamientos más importantes: la regulación del Ph y la cloración del agua.

1     REGULACIÓN DEL pH

El pH (abreviatura de potencial de hidrógeno) es una medida que nos indica la acidez o la basicidad del agua. Su escala de medición comprende valores entre 0 y 14, siendo 0 el más acido y 14 el más basico. El valor 7 nos dará lo que se conoce como Ph neutro.

Cualquier agua que destinemos al baño hemos de situarla entre 7,2 y 7,6. Estos valores no sólo nos permitirá mantener las instalaciones en óptimo estado sino que son los recomendables para la piel y los ojos de los bañistas.

El pH de agua es fundamental por lo que debemos controlarlo de forma habitual. Para realizar los análisis podemos utilizar los Estuches Analizadores Cloro-pH. En el mercado también podemos encontrar medidores digitales, así como aparatos electrónicos como los fotómetros que nos permiten analizar diferentes parámetros del agua de forma rápida y precisa.

2    CLORACIÓN

El viento, la lluvia y el polvo depositan en el agua de nuestra piscina o cascada ornamental bacterias, microorganismos y otros contaminantes que evitan que el agua se vea cristalina, además de suponer un peligro para la salud de los bañistas.

 Existen diferentes sistemas de cloración para tratar el agua:

  • Cloración tradicional
  • Otros tratamientos químicos alternativos
  • Cloración salina
  • Sistemas de radiación ultravioleta

 

  • Cloración Tradicional

El proceso de cloración consiste en añadir al agua un compuesto químico de cloro que actúa como oxidante de los elementos orgánicos de la piscina.

Hay distintas formulaciones que contienen el cloro para piscinas:

  • hipoclorito sódico
  • hipoclorito cálcico: menos agresivo para la piel e igualmente eficaz
  • tricloro: (Ácido tricloroisocianúrico) soporta mejor la luz solar y no altera el pH.

Todos ellos funcionan como oxidantes de la materia orgánica y lo hacen con diferentes intensidades según el tipo de tratamiento o momento en que realicemos el mantenimiento:

  • Cloro de choque (o tratamiento de choque): liberan una gran cantidad de cloro y se suele utilizar al principio de la temporada de baños, cuando el agua se ve más sucia o desprende mal olor.
  • Cloro en pastillas o granulado (tratamiento de acción continuada) Es el que se debe utilizar el resto de la temporada aplicándolo en el skimmer de la piscina en las cantidades que nos recomiende en fabricante

Hay que tener en cuenta que para que el proceso de cloración sea efectivo y no sea dañino para la piel o las mucosas, el pH del agua ha de estar entre 7 y 7,8.

 

  • Otros tratamientos químicos alternativo

Existen otro tipo de tratamientos alternativos al cloro que, aunque son más caros , son menos dañinos e igual de efectivos. Uno de ellos es el  Bromo, que carece de olores, no tiene efectos secundarios irritantes y posee mayor poder desinfectante que el cloro. Sin embargo, el tratamiento químico menos agresivo es el de oxígeno. Su uso está especialmente recomendado para personas con pieles delicadas o con enfermedades pulmonares. Tiene muchas ventajas, pero requiere un buen equilibrio de pH y seguir muy cuidadosamente las instrucciones de aplicación del fabricante.

 

  • Cloración salina

Es quizás el tratamiento que más está de moda y el que va poco a poco imponiéndose a las soluciones anteriores. 

La cloración salina es un proceso por el cual se añade sal común (cloruro sódico) al agua de la piscina y mediante un aparato, se separa el cloro del sodio. El cloro desinfecta el agua y vuelve a combinarse con el sodio creando sal otra vez. Y así se repite el ciclo indefinidamente.

La cantidad de sal que se le añade al agua es de 5 gramos por cada litro. Una concentración muy inferior al agua del mal que tien una media de 35 gramos de sal por litro .

El clorador que se utiliza se compone de una serie de placas paralelas, llamadas “electrodo” o “célula”, por el que se hace pasar una corriente continua. A través de estas placas hacemos circular el agua de la piscina que contiene la sal. La energía que se genera por este procedimiento crea un proceso llamado electrólisis, que produce varias reacciones electroquímicas en cada polo del electrodo.

En el polo positivo (ánodo), se producen dos reacciones de oxidación: en primer lugar se produce oxígeno O2 en forma de gas y cloro (CL2) también en forma de gas. En el polo negativo (cátodo), se produce una reacción redox que forma hidrógeno (H2) e iones de oxidrilo (OH). Cuando salen del electrodo, todo lo que se ha generado se une creando hidróxido de sodio (NaOH), hidrógeno (H) y cloro (Cl).Y este cloro, al estar en contacto con agua crea dos sustancias: ácido hipocloroso (HClO) y ácido clorhídrico (HCl).

Este ácido hipocloroso es el principal desinfectante que destruye bacterias, patógenos y algas. Luego, lentamente, el hidróxido de sodio va reaccionando con el ácido clorídrico y vuelve a crearse sal.

Para que el proceso sea efectivo y evitarnos tener que estar pendiente del estado del agua constantemente, es muy importante incorporar también un regulador de pH.

  • Sistemas de radiación ultravioleta

El proceso de desinfección consiste en pasar el agua, filtrada previamente, por una cámara en la cual se encuentran doslámparas de rayos ultravioleta. Los rayos U.V. emitidos inciden en el ADN de los gérmenes, virus, bacterias, microbios, algas y esporas, destruyéndolos en corto tiempo.

Mediante este sistema se consigue una completa desinfección del agua de manera segura y eficiente, a la vez que una excelente calidad y transparencia de ésta.